Sería bueno que hoy día en las escuelas se instaurase una asignatura que se llamase BIEN-ESTAR. Una hora también para aportar al estudiante y al profesor formas para desarrollarse emocional y mentalmente, no sólo a través del conocimiento, sino del sentimiento.
Posiblemente alguien que está aprendiendo o enseñando todo el día, tendría un “respiro” al tener a mano herramientas que le conecten con el cuerpo, que le ayuden a relajarse y que aporten equilibrio recargándose de energía.
Este taller no está pensado para tener que integrar un aprendizaje intelectual más, sino que está enfocado para que profesores, niñas y niños, aprendan como usar el material con el que trabajan día a día (borrador, pizarra, colores, bolígrafos, calculadora, sacapuntas…) para ayudarles a desarrollar el autocontrol, concentrarse mejor, aprender a relajarse, aportarles autoestima, inteligencia emocional, desarrollar la empatía, y en definitiva, crear equilibrio en el aula y reducir el estrés.
Es un método totalmente práctico, ameno, integrador y participativo, que se aprende disfrutando y despertando algo que nos ayuda a llevar las circunstancias con fortaleza, comprensión y sabiduría.
Una es visitar nuestro centro y así realizar una salida para conocer una “Escuela de herramientas para la Salud y Bienestar”.
Otra es desplazarnos nosotros al centro educativo para desarrollar el taller en las aulas o salón de actos.
Nos adaptamos a las necesidades de cada colegio o instituto en cuanto al número de personas, edades y horarios
Si desde pequeños se nos enseñara a respirar adecuadamente, a observar nuestras emociones inteligentemente, a controlar y canalizar la energía, a tener una buena postura física y mental ante la vida, a estar más atentos a cada circunstancia que nos encontramos, a querernos tal como somos, y a no apartarnos del equilibrio de la naturaleza, la vida de adulto sería muy diferente, con mochilas llenas de aprendizaje a través de un camino recorrido y vacías de culpabilidad, resentimiento y excesiva competitividad.